La mejor manera de hidratarse es tomando agua. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que, de la cantidad total de agua que nuestro organismo necesita al día (entre 2 y 2,5 l bajo condiciones normales de actividad y temperatura), el 80% sea por ingesta directa de agua y el 20% restante a través de los alimentos que ingerimos.

Recomienda que esta ingesta de agua se realice en intervalos regulares y hace hincapié en la que mejor hidratación para nuestro organismo no ha de obedecer a cuando tengamos sed, sino que debemos anticiparnos a las necesidades de nuestro cuerpo y no esperar a tener sed para beber agua. La sensación de sed es ya un síntoma de alerta que activa nuestro propio organismo, para indicarnos que el cuerpo está parcialmente deshidratado. Este síntoma puede ir acompañado de pérdida de apetito, malestar, fatiga, debilidad y dolores de cabeza y supone la pérdida de entre el 1 y el 2 % de nuestro peso corporal.

Fuente: http://institutoaguaysalud.es/la-importancia-de-la-hidratacion-en-la-actividad-fisica/